12.8.13

LA CIUDADELA



Hay un parque allá en mi tierra
que la Ciudadela llaman,
donde crecen las palmeras
y donde los pájaros cantan.
En uno de sus paseos
y en memoria de unos hombres
que en Barcelona nacieron
y en los campos de exterminio
su vida un día dejaron,
hay un círculo inclinado
que siempre mira hacia el cielo
y a ellos está dedicado,
a sus pies, miles de flores
en su recuerdo han plantado.
Cuando pases por allí
no te olvides de mirarlo,
dedícales… un minuto,
no cuesta ningún trabajo.
Dicen que no se muere
hasta que estás olvidado.
Así, entre palmeras y flores
el gorjeo de los pájaros
y el pensamiento de alguien
que por allí va pasando,
aquellos barceloneses
vivirán aún muchos años.

                      Ángela Bueso

No hay comentarios:

Publicar un comentario