MANOS

Esas manos que nunca has mirado
teniéndolas tan cerca.
no están como las tuyas,
tan cuidadas, tan suaves y perfectas. 


Esas manos arrugadas , secas
y llenas de moratones
son las manos de tu madre,
son las manos de esa vieja
que dejo toda su vida
en trabajos como esclava,
para que estudiaras
para que supieras…
para que aprendieras. 


Son las mismas manos
que te acariciaban,
te daban consuelo y amor,
y sin que lo supieras
ni de noche descansaban
cuando pequeño eras.

Son las manos de tu madre
y de tantas mujeres 
tanto blancas como negras,
que de tanto regar flores
se marchitaron primeras. 


         Ángela Bueso